Como población conformante del amplio Señorío de los Duques de Villahermosa, floreciente en sus huertas y mítico enclave de la Ínsula Barataria, gobernada por el compañero de andanzas de El Quijote de la Mancha, Sancho Panza, la localidad de Alcalá de Ebro cuenta con un archivo municipal de pequeñas dimensiones, pero muy rico en la variedad de ejemplares documentales que atesora y en la relevancia histórica de sus testimonios escritos.
De hecho, este fondo contiene documentos sueltos y cuadernos en forma de expediente fechados a partir de finales del siglo XVIII de gran valor, concretamente los pleitos íntegros y detallados, así como las escrituras notariales derivadas de la compra-venta del territorio a los Señores temporales del lugar en un ejemplar estado de conservación.
Además se conservan varios libros de catastro de hacienda, fincas rústicas y urbanas fechados entre 1791 y 1864, junto con copias de las actas municipales fechadas a partir de 1889, unas fuentes que permiten reconstruir tanto el desarrollo de la actividad de la alcaldía y sus ciudadanos, como la evolución del urbanismo poblacional o la puesta a punto de infraestructuras al servicio de la ciudadanía durante toda la contemporaneidad.